Giovani dos Santos nunca había marcado con la Selección mayor, un karma que sumado a todo lo que ha pasado en su carrera por Europa, lo tenían con la cara al suelo.
Hoy descansa de todo eso y confía en dar aún más. Los 'golpes de la vida', como lo definió en entrevista al final del duelo eliminatorio ante Trinidad y Tobago, le han hecho madurar y retomar el hambre de triunfo.
Así lo demostró ante Venezuela en el mejor partido que ha tenido con el Tricolor.
"Sé que puedo dar aún más. Haber anotado fue lo mejor porque aprendí que hay que tener tranquilidad para definir, y eso es muy importante a la hora de los juegos", dijo el atacante, quien aún no tiene definido su futuro y tiene en la Copa de Oro un escaparate para colocarse y mantenerse en Europa.
"Es un gran jugador", ha dicho en repetidas ocasiones Cuauhtémoc Blanco, ídolo de Dos Santos y modelo a seguir, "Sobre todo, por lo que ha dado en la Selección", ha complementado Gío los comentarios de Blanco, a quien se espera logre suplir cuando el tiempo lo alcance, gracias a la calidad que tiene en los pies.
La historia de Dos Santos comenzó a escribirse en el Mundial Sub-17. Balón de Plata como el segundo mejor jugador en el torneo que ganó México y lo apuntaló en los planes del Barcelona, con el que debutaría oficialmente en septiembre de 2007.
Pero el romance con el actual campeón de Europa no duró mucho y la presencia del talento del catalán Bojan Krkic hizo que la directiva blaugrana decidiera traspasarlo al Tottenham del futbol inglés.
Ahí comenzó la debacle de un joven futbolistas que fue captado por los paparazzis al salir de la fiesta de fin de año del club en malas condiciones.
La llegada de Harry Redknapp al banquillo de los Spurs detonó su préstamo al Ipswich Town. Este club de la Segunda División de Inglaterra parecía más un cementerio que una oportunidad de continuidad para la carrera del joven mexicano.
"Fue algo duro, pero me hizo madurar y valorar lo que tengo", dijo Dos Santos, quien de a poco comenzó a reencontrarse con el gol y el futbol que lo colocó no hace mucho en la categoría de promesa.
El miércoles, en el amistoso ante Venezuela, se vio un Giovani que no lucía desde ey sus primeros días en el Barcelona: dos goles y una asistencia que le hicieron lo mejor de México.
"Era el momento de demostrar, de dar el gran salto. De demostrarle al técnico lo que podemos darle a la Selección", dijo el atacante.
"Por ahí habíamos quedado a deber en otros juegos en los que no pudimos dar lo que tenemos. Pero esto ayudará a muchos de nosotros para adquirir mayor confianza y vendrán cosas mejores, de eso estoy seguro", expreesa.
De lo sucedido con el Tottenham y lo que viene para su carrera, Dos Santos prefiere dejar el tema tranquilo por unas semanas para enfocarse a lo que será la Copa de Oro, su gran apuesta: "Agradezco al entrenador por la confianza.
Sé que mi futbol da para más, apenas tengo 20 años. No por haber metido dos goles ya soy el gran jugador, soy un joven que quiere seguir creciendo".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario